Amiga

Querida amiga:

A pesar de lo que sientas, quisiera decirte que no todo es negro o blanco, que no todo es malo o bueno al ciento por ciento; también quisiera decirte que no es saludable hacer siempre nuestra voluntad, porque si miras con atención, más bien, si escuchas con atención, las personas siempre somos los buenos en las historias, no porque así sea en realidad, sino porque nosotros mismos las contamos pensando que la forma en que actuamos estuvo bien y que los demás están mal, pero si le preguntamos al otro, al que decimos que hizo mal, nos dará su opinión y dirá que él tiene la razón. 

Sabrás que cuando hacemos las cosas por nosotros mismos sentimos que las hacemos mejor, porque hay un sentimiento de mayor satisfacción, por eso dicen: "no hay como hacer las cosas por uno mismo", ¿te has preguntado por qué?, podrás responder que porque eres perfeccionista y tú las haces mejor, pero... ¿quién dice que la verdad se encuentra totalmente en uno mismo?, ¿sabes cuál es la realidad?, lo cierto es lo vemos mejor porque lo hemos hecho a nuestro gusto, nos satisface personalmente, pero a otros puede no gustarles y no está mal, lo que pasa es que lo bueno para ti, no es lo bueno para todo el mundo; por eso no existe lo perfecto, porque para ser perfecto quizás lo debería ser para todos, la perfección está en los ojos de cada individuo, todas la vemos de diferentes maneras, esa es la verdad.

Así que no estás bien, ni estás mal, sólo no te aferres a una idea, lo que opines dilo al viento, pero no le busques ancla en ningún pecho, déjalo volar y despreocúpate por convencer al mundo de que tienes la verdad absoluta, bien sabes en tu interior que lo crees con todo tu corazón y que eso te baste, porque si para tu vida funciona está bien, todos tenemos nuestras historias y bien dicen, cada cual las cuenta como les fue en la feria. Pero mantén tu corazón libre y si alguien te dice algo que te convenza de algo contrario a tu pensamiento, guárdalo y en un lugar tranquilo, donde puedas deshacerte de tu orgullo, dale una oportunidad, en silencio, sólo tú importas, no tienes que demostrarle nada a nadie.
Que ver la vida de colores sea tu lema, olvídate del blanco y negro, del rotundo sí o el categórico no, date la oportunidad de dar y recibir sin miedo, la clave está en no esperar y sólo disfrutar del momento, así es todo en el mundo, fugaz... la alegría y la tristeza, no te quedes en un solo lugar, vive los intermedios de calma y disfruta cada instante.

Casi para terminar, lo hecho, hecho está, no te reproches, nadie te va a castigar, sólo tú misma tienes esa autoridad; haz de lo que viene en tu futuro algo que te satisfaga y te llene de felicidad, ama el simple hecho de amar, porque si puedes esperar algo de alguna persona, esa persona eres tú, no alguien más.

Con cariño,

Una persona que te quiere, y te quiere ver feliz.